No vino cuca, como yo esperaba. Vino solo guiver
amí me pareció raro que saltara por encima de la valla en lugar de abrir con llave como siempre, pero como a veces lo hace...
- Y nosotros, ¿por dónde salimos? Nosotros no podemos saltar tan alto!
Y pensé: ¿no se habrá olvidado la llave? y me olí lo peor: Adiós paseo!
Efectivamente, al bajar por el otro lado de la puerta, subió a la bici... y adiós.
No hay comentarios:
Publicar un comentario